Europa, Reducir el consumo energético, es una de las tres principales preocupaciones en cuanto a sostenibilidad que inquieta hoy en día a los gerentes de campos de golf de España, así lo apunta un informe elaborado por la Asociación Española de Gerentes de Golf (AEGG). Y es que mejorar la eficiencia energética de estas instalaciones no es solo un reto enfocado a obtener un mayor ahorro y reducción de gasto, es una apuesta por el futuro, por la sostenibilidad y el aprovechamiento de recursos.
En Andalucía, destino de golf turístico por excelencia de Europa, con 93 campos en activo, la mejora de la eficiencia energética se incluye dentro del decreto regulador de las condiciones de implantación y funcionamiento de los campos de golf. Esta normativa establece que «los campos de golf deberán emplear energías renovables en sus instalaciones y edificaciones, combinándolas con el establecimiento de medidas de ahorro y eficiencia energéticas».
1. Ahorrar agua es ahorrar energía
El riego supone entre el 50 y el 70% del gasto energético en un campo de golf, así lo señala la ‘Guía de gestión energética en zonas verdes y campos de golf’ editada por la Fundación de la Energía de la Comunidad de Madrid. Por tanto, uno de los principales aspectos que se debe abordar para ahorrar y reducir el consumo energético de estas instalaciones es gestionar de modo adecuado el uso del agua.
«Hay que trabajar el binomio agua/energía», apuntan los autores de esta Guía, «en la medida que mejore la eficiencia en el uso del agua, mejorará asimismo la eficiencia energética». La actuación en la eficiencia de los motores y sistemas de impulsión del agua, los sistemas de filtración y los sistemas de riego pueden lograr que el ahorro energético anual sea superior al 50%.
2. Mejorar las instalaciones y equipos
El riego no es la única actividad que consume energía en un campo de golf. La siega, la fertilización, los tratamientos fitosanitarios, la limpieza y otras tareas de mantenimiento inciden también en el gasto energético. El estudio y valoración de la eficiencia energética de los equipos e instalaciones que se utilizan en estas tareas aporta la información necesaria para mejorar el rendimiento con la sustitución o incorporación de nuevos equipos y lograr así un ahorro de energía.
3. Gestionar las tarifas eléctricas
Otro de los pasos necesarios para reducir los costes energéticos de las instalaciones de un campo de golf es la optimización de la tarifa eléctrica contratada. Para encontrar la mejor opción de contratación, es fundamental realizar un estudio previo de la factura, analizar el mercado y sobre todo los patrones de consumo.
Saber interpretar el contrato de la luz e identificar las áreas de posible ahorro no es una tarea sencilla, por eso, lo habitual es delegar esta gestión en una consultora experta en ahorro energético. Estos especialistas, además de estar cualificados para realizar esta tarea, tienen una mayor capacidad de negociación con las comercializadoras de electricidad gracias al volumen de compra que gestionan.
4. Contar con el asesoramiento de expertos
Para iniciar un proceso de renovación y mejora de la eficiencia energética de un campo de golf es fundamental contar con el asesoramiento y servicio de expertos en la materia. Los consultores energéticos son los profesionales más cualificados para esta tarea. Sus funciones son:
- Realizar un estudio pormenorizado para detectar las necesidades específicas de cada instalación.
- Elaborar una propuesta con las soluciones que mejor se adaptan a ellas y las medidas de ahorro y eficiencia más adecuadas para que la inversión sea rentable.
- Informar sobre las ayudas y subvenciones que se pueden obtener para realizar el proyecto de eficiencia energética y gestionar los trámites para beneficiarse de ellas.
- Asesorar al cliente para que todo el proceso de mejorar de la eficiencia energética cumpla con la ley y la normativa vigente.